viernes, 10 de febrero de 2012

En un país multicolor...

   Existen minipaíses, llamados paraísos fiscales en los que se guarda la pasta gansa, que precisamente se guarda por no ser legal la forma en la que se obtuvo, o para no pagar impuestos por ese dinero, o por ambas cosas.
   Uno de ellos, se lleva la palma. Está en Centroeuropa, y curiosamente se ha salvado de todas las guerras en el siglo XX.
   Si por extravío, o por una aberración del destino, cayera allí una bomba de 15 kilotones, los efectos secundarios de la explosión en sí, no iban a ser lo peor.
   Lo peor vendría en las siguientes semanas, o incluso meses. No se vería el Sol, cegado éste por las nubes de billetes que aparecerían en la atmósfera. Volveríamos probablemente al período de la glaciación.
   Tanta evasión de capitales, no podía llegar a nada bueno.