La III Guerra Mundial está cociéndose a fuego lento.
Ahora, comprendo cómo nos han vendido el escudo antimisiles de la base de Rota en Cádiz. Es cuestión de poco tiempo. El suficiente, para intentar tener Europa “protegida”, y a su vez, ir avanzando, hasta intentar cerrar el cerco a Irán, no sin antes haber controlado Siria. Ahora que Libia está “controlada”.
Cualquier aficionado al ajedrez, podrá darse cuenta, de que es una jugada maestra de una parte.
Pero la otra parte sabe cómo defenderse. Ajedrez en estado puro. Mueven las fichas blancas. Responden las fichas negras. NO HAY POSIBILIDAD DE TABLAS.
Ojalá se tratara de un simple tablero de ajedrez, en el cual, los contendientes se dieran la mano al terminar la partida. Mucho me temo, que lo que deparará el futuro mas inmediato, es la hecatombe.
Tanto tiempo, pensando en el famoso botón rojo, que cualquier presidente de las dos potencias tenían el poder de apretar, y resulta que ahora todavía es más fácil. Por lo menos antes, había un cierto equilibrio de fuerzas...
Espero que por el bien del ser humano, no lleguen a ser tan imbéciles, como para hacer esa última jugada. Porque sin duda, será la última, y no habrá vencedores, ni vencidos. Ni siquiera la partida podrá quedar en “tablas”.
